nuestra promesa

“No participaré de la Porno-miseria.”


Respetaremos los derechos humanos de los niños y niñas y también los derechos de los habitantes,
pero priorizaremos la felicidad de los empleados y miembros de la familia más ya que sabemos que debemos estar felices primero para poder compartir felicidad.
Haremos que nuestras finanzas sean más transparentes.
No seremos influenciados por grandes capitales, empresas, medios de difusión  ni aquellas personas que no compartan nuestros ideales y objetivos.
Nos comunicaremos aún más de cerca.


No solo se trata de una ayuda con necesidades básicas, sino ayudar a lograr un autoabastecimiento.
No ocultaremos nuestros errores y fracasos.
Trabajaremos felizmente.
Seremos felices porque esa es nuestra prioridad.


¡Muchas gracias por estar siempre con nosotros, amarnos y alentarnos!

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